Salmorejo con fresones


Esta es una variación del clásico Salmorejo cordobés, al que aparte de todos los ingredientes que siempre le ponemos, le hemos añadido fresones.

Queda todo igual, en cuanto a textura y apariencia, pero el retrogusto que te queda cuando ya has tragado la primera cuchara, es el del fresón, por lo que simplemente presento un nuevo gusto a añadir al clásico salmorejo: No debo dejar de decir que en casa se suscitaron discusiones entre los partidarios del salmorejo de toda la vida y los que les gustó la novedad.

Mi opinión es que, si bien prefiero el tradicional, para alguna ocasión especial en que se quiera sorprender, es una buena alternativa.

Ingredientes para 6 personas

- 1/2 barra de pan de 1/2 kg
- 6 fresones
- 8 tomates tipo pera
- 1 diente de ajo grande
- aceite de oliva virgen extra
- sal
- vinagre de jerez

Comentarios a los ingredientes:  Se pueden usar cualquier tipo de tomate, siempre que sea maduro, pero si hay en el mercado, prefiero los de tipo pera, que tienen la piel fina y una pulpa no demasiado acuosa.  Y en cuanto al vinagre, se puede utilizar cualquiera que os guste, pero para los gazpachos y salmorejos, yo prefiero el de jerez. Parece que le de un sabor más auténtico.

Y empecemos... Para los que no hayan hecho salmorejo en su vida, es exactamente igual, pero sin los fresones...

Se pone la 1/2 barra de pan en remojo, totalmente cubierta.

Mientras, en un bol hondo, o en el vaso de la batidora, si es grande o del tipo de la foto, ponéis los tomates a cachos (aquí también he de aclarar algo: como utilizo batidora de vaso, solo los limpio y les quito la parte del rabito, pero no los pelo, ya que al triturar, se queda todo deshecho y no se nota, pero si se va utilizar batidora de mano u se quiere ser más preciso, se pelan con cuidado antes) y  el diente de ajo laminado (yo le quito el corazón para que no repita).

Se escurre la barra y se le quita con cuidado la costra, para dejar sólo la miga. Se escurre el agua, y se añade al bol o vaso, junto a los tomates y el diente de ajo.  Y los fresones.



Se riega con aceite (lo suelo hacerr a ojo, pero es como 1/2 vaso de agua),  el vinagre (un chorreón largo) y sal (como una cucharadita de caf)é.

Se tritura todo durante unos minutos y se prueba. Se le añade más vinagre o más sal, según nuestro gusto y se vuelve a pasar un poco más, hasta que queda la consistencia de un puré ligero.

Se toma a temperatura ambiente o ligeramente refrescado en la nevera.

Se puede acompañar de jamón serrano a dados, o con trocitos de fresones.

Si hablamos del salmorejo tradicional, lo usual es acompañarlo de huevo duro troceado y jamón serrano.

Qué os guste!





Comentarios

  1. Nunca lo he probado con fresones. asi q me parece q ya se cual va a ser mi proximo salmorejo.
    un saludo

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    Respuestas
    1. Cuando lo pruebes, luego comenta qué opinas! A ver si prefieres la versión clásica o ésta.
      Gracias por tu comentario. Saludos

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  2. Mis padres son de Cordoba y como comprederas he probado cientos de veces el salmorejo.....me encanta...pero CON FRESONES?????
    Menudo descubrimiento, esto hay que probarlo,seguro que debe de estar muy bueno...te cuento.
    Besos
    Miguel
    lareposteriademiguel.blogspot.com

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  3. Gracias por tu comentario Miguel! Ya me dirás si te han gustado o no. Yo también tengo raíces en Córdoba, así que desde siempre he tenido el salmorejo como plato de cabecera en muchas comidas, y yo sigo con él porque en casa nos gusta a todos.

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